Tel Aviv, 19 de agosto de 2024 (EFE). — El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, anunció este lunes que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha aceptado la última propuesta de Washington para un alto el fuego en la Franja de Gaza, e instó a Hamás a hacer lo mismo.
En una conferencia de prensa en Tel Aviv, Blinken explicó que mantuvo una “reunión muy constructiva” con Netanyahu, quien le confirmó que Israel está dispuesto a aceptar la “propuesta de transición” planteada por Estados Unidos la semana pasada en las negociaciones realizadas en Doha, Qatar.
El secretario de Estado, que llegó a Israel para impulsar los esfuerzos diplomáticos internacionales en busca de un pacto, también se reunió con el presidente israelí, Isaac Herzog, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant. En esos encuentros, Blinken subrayó la urgencia de alcanzar un acuerdo, advirtiendo que esta podría ser la última oportunidad tras meses de negociaciones fallidas.
“El siguiente paso es que Hamás diga que sí”, declaró Blinken, subrayando la necesidad de que el grupo islamista acepte la propuesta. Sin embargo, Hamás, que no participó en la última ronda de negociaciones en Doha, expresó su descontento con la propuesta, argumentando que se pliega a las exigencias de Israel.
La propuesta de Estados Unidos busca poner fin a más de diez meses de conflicto en la región y evitar una escalada mayor, especialmente tras el asesinato del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán, y la muerte del jefe militar de Hezbolá, Fuad Shukr, en un bombardeo israelí en Beirut.
Netanyahu se comprometió a enviar a su equipo negociador a El Cairo a finales de esta semana para continuar las conversaciones, mientras que la postura de Hamás aún no ha sido anunciada.
Blinken insistió en la importancia de cerrar un acuerdo ahora, reafirmando el compromiso de Estados Unidos en lograrlo. Además, Netanyahu agradeció a Estados Unidos su apoyo en las negociaciones y en la defensa de Israel frente a la amenaza iraní.
El acuerdo también contempla esfuerzos para la liberación de rehenes en la primera fase de la transacción, según Netanyahu, lo que añade un elemento humanitario crucial a las conversaciones.
