El campeón mexicano Saul Álvarez perdió sobre el escritorio el cinturón de la Federación Internacional de Boxeo al no llegar a un acuerdo con el ruso Sergio Derevyanchenko, retador mandatorio y varias veces emplazado.
A tres meses de haberle arrebatado el título el tapatío tuvo que dejarlo ir por no lograr aterrizar las negociaciones con sus contrapartes.
Luego de varias semanas de intensas negociaciones en las que se buscaba un rival para su siguiente cita, las pláticas alcanzaron su límite y fue echada para abajo luego de que dinero fuera impedimento, a pesar de que el mexicano aceptara una reducción de 5 millones de dólares a su bolsa.
“Estamos desilusionados de que la FIB obligue al mejor peleador a desistir del campeonato. Después de ofrecer una gran suma de dinero, ahora entiendo que Derevyanchenko jamás tuvo la intención de pelear”, declaró Óscar de la Hoya
Derevyanchenko quien también estaba negociando con Gennady Golovkin ahora podrá enfrentar al Kazajistán por la diadema vacante.
Este es el segundo movimiento fuerte en esta segunda mitad del 2019, luego de que la promotora de Canelo decidiera cancelar la fecha de septiembre por falta de un rival que reuniera las características deseadas.
Según información de ESPN, Golden Boy y Álvarez habían hecho un último esfuerzo para mantener el título de la FIB al pedir una excepción a la defensa obligatoria contra Derevyanchenko al decir que Álvarez pelearía una pelea de unificación con su homólogo de la OMB, Demetrius Andrade.
Las reglas de la FIB permiten una lucha de unificación para posponer a una defensa obligatoria, pero solo si la solicitud se realiza dentro de un marco de tiempo específico, que Golden Boy no cumplió, según una carta entregada por el presidente del organismo Darrill Peoples.
Fuente: Milenio
