La Premier League se está adaptando a nuevas reglas de juego para evitar la propagación del COVID-19 y una de las medidas que ha tomado para la siguiente temporada, será, la tarjeta roja, para quien tosa en el terreno de juego.
The Times, la nueva temporada incluirá en su reglamentación una norma por la que un jugador podrá ser expulsado si tose hacia un contrario de forma intencionada.
Añade que “cuando el árbitro esté seguro de que alguien tose a corta distancia contra un rival de modo deliberado podrá enviarlo a vestuarios con una roja directa”.
Se considerará, entonces, una acción ofensiva al igual que un insulto o gesto abusivo, a pesar del matiz de que debe ser a escasa distancia y a propósito, por lo que será como siempre motivo de polémica dado que será el colegiado quien deba interpretar la intencionalidad.
No obstante podría quedarse en una advertencia al jugador que lo haga si no es “un incidente lo suficientemente grave”.
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