Debido a que la aviación vive la crisis más sensible de su historia, las aerolíneas mexicanas han disminuido hasta en 90 por ciento sus operaciones regulares durante la fase tres de la emergencia sanitaria, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA) llamó a todas las empresas y al gobierno a trabajar juntos en acciones que permitan mantener con vida al sector y a los más de 1.5 millones de trabajadores directos e indirectos que genera esta industria.
En un comunicado, propuso abrir un espacio de diálogo en el que todos los involucrados en la industria aérea estén representados. “Es necesario que las aerolíneas, sus directivas, trabajadores y el gobierno federal nos sentemos a analizar el panorama en corto y mediano plazo para proponer en conjunto herramientas que permitan mantener las fuentes de trabajo”, dijo Rafael Díaz Covarrubias, líder de ASPA.
Refirió que el sector aéreo “es un eje fundamental en la economía mexicana aportando el 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), además de ser el promotor del turismo y de la conectividad de México con el mundo”, por estas razones -aseguró- es urgente establecer un plan de apoyo para la industria en el cual la conservación de los empleos sea una prioridad.
Los trabajadores, “en prácticamente todas las categorías, hemos contribuido para que haya liquidez en las aerolíneas durante esta crisis. En el caso particular de los pilotos de ASPA en grupo Aeroméxico, apoyamos con la aportación de más del 50 por ciento de nuestros salarios por siete catorcenas, además de rotación de personal sin goce de sueldo; los pilotos de Aeromar también están disminuyendo en más del 40 por ciento sus percepciones durante tres meses. Sin embargo, el impacto de esta crisis es tan grande que pone en riesgo la permanencia de muchas aerolíneas y las fuentes de empleo que sostienen a millones de familias.”, aseguró.
Díaz Covarrubias indicó que a la fecha, los pilotos de la organización sindical que encabeza, han realizado más de 47 operaciones aéreas entre vuelos para repatriar a más de tres mil mexicanos y chárters de carga para el gobierno federal y empresas privadas, manteniendo así la conectividad y creando un puente aéreo que ha permitido traer al país y a América Latina toneladas de insumos médicos que se distribuirán en el sector salud.
“Es momento de olvidar las divisiones y trabajar en conjunto por el bien de esta gran industria y sus fuentes de empleo”, aseveró Díaz Covarrubias.
