Carmen Medel lo volvió a hacer: su más reciente pifia superó a las anteriores.
En su intento de madrugar enredó al diputado Federal Alfonso Ramírez Cuéllar, terminó desconociendo el liderazgo de Mario Delgado y Esteban Ramírez Zepeta, la desmintieron públicamente y remató haciéndole el gasto al restaurante de su compadre candidato del PRI-PAN.
Todo eso junto en un solo movimiento, con lo que Carmen Medel se consolida como una mujer talentosa para la pifia.
A la usanza de los mejores jugadores de billar, Carmen Medel embarró lodo por más de una banda.
Pensando que por madrugar podría rescatar su causa perdida, Carmen Medel vuelve a ser mala noticia, al fracasar su intento de chamaquear gente, incluída a otra aspirante, Elizabeth Reyes Toledo.
Llevada con engaños a una reunión con el diputado Ramírez Cuéllar, Elizabeth Reyes acudió a lo sería un encuentro con el Legislador Federal, que Carmen Medel intentó hacer pasar como de apoyo a sus aspiraciones.
Nada más falso: la propia Elizabeth Reyes rechazó que su presencia fuera adherencia y reiteró que ella sigue vigente en la contienda interna de Morena.
El propio Ramírez Cuéllar precisó que se trató de una reunión de despedida de Carmen Medel, quién se separará del cargo en breve.
La jornada de fracaso parecía completa, pero se las arregló para empeorarla: desconoció el liderazgo de Mario Delgado y Esteban Ramírez Zepeta al declarar que el único líder de Morena es el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y para rematar con broche de oro, se llevó a Ramírez Cuéllar a comer al restaurante de su compadre, el candidato del PRI-PAN, Nicolás Ruiz Roset.
Queda claro que Carmen Medel se podría hacer más daño a sí misma si el día tuviera más horas.
Si la desesperación hunde a los nadadores novatos, lo mismo ocurre con los políticos que están a punto de perder las esperanzas.