México reclama 50 piezas definidas y protegidas como Monumentos Arqueológicos Muebles, anunciadas en dos subastas programadas para la próxima semana en París, informó la Secretaría de Cultura.
A nombre del Gobierno y del pueblo de México, y en conformidad con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, las autoridades culturales enviaron sendas cartas a la Société Baecque et Associés y a la Société Binoche et Giquello para manifestar una rotunda desaprobación a las subastas anunciadas para los días 9 y 11 de febrero, respectivamente.
“Dichas piezas representan un legado invaluable de nuestras culturas ancestrales que forman parte de nuestro patrimonio histórico y una muestra de la diversidad y riqueza cultural de México”, se expresa en los documentos.
Las casas subastadoras describen las piezas como procedentes del territorio mexicano, por lo que Secretaría de Cultura hizo un nuevo llamado para detener la venta de estos bienes patrimoniales mexicanos, además se iniciaron los protocolos legales y diplomáticos para sacarlos del comercio.
En la venta Art Precolombien, de la Société Binoche et Giquello, fueron identificadas 47 piezas que pertenecen al patrimonio de México, mientras que en Art Précolombien-Arts Premieres, de la Société Baecque et Associés, se identificaron tres piezas más como bienes procedentes de México: una máscara antropomorfa miniatura y dos pendientes elaborados en roca metamórfica.
Las piezas provienen de culturas mexicanas y, por tanto, pertenecen al patrimonio nacional, por lo que la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informaron que ya interpusieron las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General de la República (FGR).
También se solicitó a la Consultoría Jurídica de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) la asistencia diplomática necesaria para llevar a cabo las acciones que permitan proteger el patrimonio cultural del país.
En las misivas enviadas por la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, se hace referencia a los dictámenes en materia de arqueología realizados por especialistas del INAH a partir de los catálogos digitales de las subastas.
Frausto exhortó nuevamente a reflexionar respecto a los códigos éticos y morales en torno a la comercialización de bienes culturales expoliados, lo que atenta contra el patrimonio de la humanidad.
Llamó a detener la venta, bajo la consideración de que los valores históricos, simbólicos y culturales de dichos bienes son superiores a cualquier interés comercial, e invitó a las casas subastadoras a sumarse a la protección y salvaguarda del patrimonio cultural y a pensar en una posible repatriación de dichas piezas.
A la par, se anunció que en cada subasta realizada en el extranjero en que se intente comercializar el patrimonio nacional continuará la campaña titulada #MiPatrimonioNoSeVende,para desincentivar el interés por la compra y a generar conciencia de que no se trata de adornos ni artículos de lujo, sino de objetos que son testimonio de la identidad y la memoria de los pueblos originarios de México.
Días atrás, México también se pronunció para tratar de detener la subasta de 30 piezas arqueológicas que pertenecen al patrimonio nacional, pero la venta organizada por la casa Millon se llevó a cabo el 28 de enero.
Con información de: Aristegui noticias.