El senador Samuel García fue abucheado por empleados de Pemex, quienes dañaron su camioneta, al clausurar de manera simbólica la refinería de Cadereyta en Nuevo León.
El legislador de Movimiento Ciudadano acudió acompañado de miembros de organizaciones civiles para visibilizar que los contaminantes que emite la refinería de Cadereyta están ‘envenenando’ y ‘matando’ a la gente de Nuevo León, y que esto se puede evitar.
Señaló que el dinero, tanto de los mexicanos como de los trabajadores, se ha perdido en actos de corrupción dentro de Petróleos Mexicanos y sus sindicatos, cuando podría usarse en modernizar la refinería e instalar filtros para los contaminantes que emite.
García Sepúlveda denunció que la contaminación del aire es la principal causa de muerte de cinco mil personas al año en Nuevo León y que la refinería de Cadereyta es una de las grandes contaminantes.
Por ello, pide que se instalen filtros en sus chimeneas para controlar las emisiones contaminantes, o bien, que sea reubicada.
La protesta de Samuel García fue mal recibida por los trabajadores de la refinería, quienes rodearon su camioneta y la golpearon hasta romperle los vidrios.
Tras la agresión, el senador aseguró que no busca que los trabajadores de Pemex sean despedidos sino que la compañía reduzca sus emisiones contaminantes.
“No somos enemigos de los trabajadores, somos sus aliados: lo que queremos es que la refinería deje de envenenar a ustedes, sus familias y a los habitantes de Nuevo León, sin quitarles el trabajo”, aseguró.
Con información de López-Dóriga Digital
