La juez Primero de Distrito de Amparo en Materia Penal con sede en la Ciudad de México, Sandra Leticia Robledo Magaña, desestimó las pruebas que ofreció Gilda Margarita Austin y Solís, madre de Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), en la ampliación de su demanda de garantías.
La juez emitió un acuerdo en el que determinó no aceptar las documentales, y aplazó el dictado de resolución para el 14 de octubre.
Gilda Austin busca obtener un amparo contra la orden de aprehensión que libró un juez de control, a petición de la Fiscalía General de la República (FGR), por su presunta responsabilidad en los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa, por el caso Odebrecht.
Hace unos días, la juez declaró infundado un recurso de incidente de modificación de sentencia definitiva, con el cual la FGR la pretendía dejar sin protección.
La suspensión definitiva concedida a la madre del exfuncionario impide a la FGR ejecutar la orden de aprehensión, medida cautelar que continúa vigente.
La madre de Lozoya fue detenida el 24 de julio de este año por agentes de la Policía de Alemania adscritos a Interpol, cuando se encontraba de vacaciones con sus nietos en la isla de Juist, en Frisia Oriental, Baja Sajonia.
La captura derivó de una ‘ficha roja’ emitida por la Interpol, con base en una orden de aprehensión girada por un juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el Reclusorio Preventivo Norte.
Los delitos que se le imputan no ameritan prisión preventiva oficiosa, y se pueden enfrentar en libertad.
De acuerdo con la investigación de la FGR, la madre de Emilio Lozoya recibió el 22 de noviembre de 2012, de la empresa Tochos Holdings Limited, ligada a la familia Lozoya, 185 mil dólares a una cuenta de BBVA Bancomer, de la que es único beneficiario el exdirector de Pemex.
El dinero fue utilizado supuestamente por Marielle Helene Eckes, esposa de Lozoya, para comprar una residencia en Ixtapa, Guerrero, en un millón 900 mil dólares.
Se presume que los 185 mil dólares forman parte de los 10.5 millones de dólares que la constructora brasileña Odebrecht entregó a Emilio Lozoya, a cambio de contratos con Petróleos Mexicanos.
Fuente: Milenio
