En medio del asfixiante calor que azota la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, los comerciantes de aguas frescas celebran un incremento sin precedentes en sus ventas, alcanzando un alza de hasta un 60% en la afluencia de clientes.
Con termómetros que superan los 30 grados centígrados, los habitantes de la región han recurrido en masa a las tradicionales aguas frescas como una forma de combatir el sofocante clima. Desde los clásicos sabores de limón y Jamaica hasta opciones más exóticas como sandía y pepino con chía, las opciones refrescantes no han dejado de desfilar por los establecimientos dedicados a este negocio.
Los vendedores ambulantes también han experimentado un auge en sus negocios, con largas filas de personas ansiosas por refrescarse con una bebida fría.
Este fenómeno no es nuevo para la región, donde las altas temperaturas son una constante durante la temporada de calor. Sin embargo, el incremento récord en las ventas de aguas frescas este año ha sorprendido incluso a los comerciantes más experimentados, quienes se han visto obligados a aumentar su producción para satisfacer la creciente demanda.
Con el pronóstico de altas temperaturas extendiéndose en el horizonte, parece que las aguas frescas seguirán siendo la opción preferida de los veracruzanos y boqueños para combatir el calor en los próximos meses.
