La Fiscalía General del Estado de Baja California informó que tres personas, detenidas la semana pasada por su presunta participación en el asesinato de la periodista Lourdes Maldonado, fueron vinculadas a proceso.
Una jueza de control impuso la medida cautelar de prisión preventiva a los tres detenidos y autorizó un plazo de seis meses para la investigación del caso.
“A los tres imputados, de nombres Erick “N”, Guillermo “N” y Kevin “N”, se les vinculó a proceso penal por el delito de homicidio calificado en contra de la periodista Lourdes Maldonado López”, indicó anoche la fiscalía local en sus redes sociales.
Cerca de las 23:00 horas del 9 de febrero se realizó la audiencia en la cual la Agencia del Ministerio Público notificó a los imputados que se les acusa de homicidio calificado en calidad de coautoría; en uso de su derecho y previa asesoría de su defensa, los tres detenidos decidieron guardar silencio durante la sesión.
Los acusados solicitaron ampliar el plazo de 144 horas para resolver su situación jurídica, mismo que venció ayer con la audiencia en la que se anunció su vinculación a proceso.
“Procede el órgano jurisdiccional a resolver que cuenta con suficientes datos de prueba para acreditar el hecho delictivo, y la probable responsabilidad de los tres imputados en el homicidio de la víctima, valorando cada una de los antecedentes de investigación aportados por la Fiscalía”, indicó la fiscalía de Baja California.
El miércoles de la semana pasada, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció la detención de estas tres personas a partir de un trabajo conjunto del gobierno federal y de Baja California.
Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), explicó que un elemento clave para la ubicación y detención de los presuntos responsables fue el rastreo de un taxi que estuvo merodeando la vivienda de Lourdes Maldonado momentos antes del asesinato el pasado 23 de enero, esperando el momento en que ella llegara a su casa en una privada de la ciudad de Tijuana. Las evidencias fueron recopiladas a través de cámaras vecinales.
