El transporte de mercancías en México es un trabajo de alto riesgo. Cada día se perpetran 50 asaltos a tráileres en el país, de acuerdo con cifras de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (CONCAMIN). La ola de violencia y la falta de respuesta de las autoridades obligaron a los camioneros a ‘meter el freno de mano’ y organizar el Paro Nacional de Transportistas.
Pese a que la protesta se realizó en la autopista México-Puebla, la México-Cuernavaca, la México-Pachuca y la México-Querétaro, entre otras, el ‘aventón de lámina’ de los transportistas llegó hasta Palacio Nacional, donde el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó “un propósito politiquero” en el movimiento.
También se ‘metió’ hasta las cúpulas empresariales, que respondieron a los dichos del presidente.
Debido a las condiciones que enfrentan, los integrantes de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (AMOTAC) sostienen las siguientes exigencias para la autoridades:
- Mayor seguridad de transportistas y usuarios de las vías de comunicación,
- Prohibición de vehículos doblemente articulados,
- Devolución de carreteras federales (libres) que se volvieron de cuota,
- Tarifas oficiales,
- Aplicar el reglamento a grúas,
- Alto a los abusos y extorsiones de la policía.
Fuente: El Financiero